jueves, 27 de noviembre de 2008

Corvinas y Bagres de Mar

En el Rio de la Plata
Los visitantes del mar Cada primavera marca el recambio de especies en el río color de león y los pescadores deportivos asistimos a la despedida del pejerrey y una doble entrada de peces de estación: por un lado, la variada de verano que viene del Delta. Por otro, dos especies de mar que ingresan al estuario y a las que hay que aprovechar en su momento: las corvinas y los bagres de mar. El arranque de temporada, en zona Sur, permite anticiparnos al mejor mes para dar con estos dos viajeros del océano que tocan nuestras playas para ésta época. Por WILMAR MERINO Cuando las flechas de plata ya comienzan a ser recuerdo y el calor sube unos grados sobre y debajo de la superficie, es tiempo de corvinas y bagres de mar en el Río de la Plata. Ambas especies, llegan por la zona con distintos fines (una en tránsito y otra con fines reproductivos) y prolongan su estadía hasta mediados de diciembre. Desde mediados de octubre, podemos decir que la pesca de ambas especies está casi (en pesca siempre hay que decir “casi”) garantizada. Las primeras en llegar son las corvinas, presentes desde septiembre y antes también en el estuario. Lo que pasa es que en esos tiempos el pescador está buscando pejerreyes… pero sí dan cuenta de los cardúmenes de avanzada los barquitos amarillos que producen verdaderas masacres. A ello hay que sumarle una cantidad de pescadores “artesanales” que con sus truckers también depredan las piedras cercanas a la costa, mermando a una especie que ya viene sufriendo pesca intensiva desde el Uruguay, en gran medida. Sin embargo, queda resto para los de la caña. Por su parte, el bagre de mar, también llamado mimoso o mochuelo, también llega con la corriente cálida del Brasil y –a diferencia de la corvina que viaja hacia la costa atlántica- remonta hacia el norte ingresando al estuario, para desovar en pozones profundos del Guazú, el Uruguay y el Bravo hacia el mes de noviembre. La pesca de corvinas y bagres en zona Sur del Riopla tiene un encanto particular: por tratarse de aguas poco profundas se pueden alivianar los equipos, maximizando la lucha de éstas combativas especies que tienen verdaderos fanáticos en la costa rioplatense. Corvinas en La Balandra La pesca de corvinas en el Río de la Plata se realiza en una franja que va desde Berisso a Punta Indio, siendo los pesqueros clásicos playa La Balandra y Magdalena. En este caso, convocados por los guías Oscar Creo (padre e hijo de nombre homónimo) salimos de La Balandra, playa ubicada unos 20 km. al sur de Berisso. Se accede desde Berisso (camino que deberán tomar platenses y porteños) tomando la calle Montevideo hasta que se corta, y luego doblando a la izquierda (a la derecha iríamos hacia Ruta 11) hasta el río. Allí nos esperaban los profesionales, con todo listo en la lancha, salvo nuestros equipos. La primera sorpresa vino con el método de embarque. El Plata en ésta zona no tiene muelles ni amarraderos, presentando una playa con suave declive y canaletas. La lancha está en el agua a unos 50 metros de la costa y los guías, con waders calzados, nos llevaron a caballito hasta la embarcación. El sistema no será el más elegante pero sí es muy efectivo. Y evitamos el triste espectáculo de ver cómo personajes pasados de copas azotan a un maltratado caballito cuando se empantana un trailer en el barro. Todo dicho. El viaje Embarcados ya en la cómoda trucker de los guías, hicimos la primera parada a 700 metros de la costa, en piedras que tienen los profesionales marcadas en su GPS. Ni un pique. Nos fuimos moviendo cada 20 minutos sin respuestas ante el desconcierto de los guías, que habían estado pescando en esas zonas con singular éxito y no podían creer el sapo que estábamos haciendo. Luego proponen ir al canal, señalizado por la boya 5, allí donde el pique “nunca falla” y en donde usualmente se cobra la pieza mayor en la Fiesta de la Corvina rioplatense. Pero esta vez falló. Siendo el mediodía y sin más capturas que algunos bagres comunes que tomaban nuestras líneas de fondo encarnadas con camarones y anchoas, decidimos volver más cerca de la costa, dado que encima de la falta de pique se había levantado un vientito amenazador. Con una rica picada matizamos la angustia del cajón vacío. Pero al fin, las cosas cambiaron: La creciente y el parate de agua dieron pique nulo, pero al comenzar la bajante las corvinas se activaron. Primero clavó Roberto Scocco, luego Creo padre, finalmente quien esto escribe. Lo mejor es que todas las corvinas eran de excelente tamaño, pesando entre 1 y 1,800 kg. Llamativamente, no hubo corvinas chicas, descarnadoras frecuentes que nos hacen olvidar la pureza del lenguaje. Esta vez, en cambio, los portes fueron parejos de buenos para arriba, dando piques francos y peleas bravas, teniendo en cuenta que usábamos equipos de bait casting Shimano muy livianos y plomadas no mayores a 50 gramos.Las carnadas, provistas por los guías a sus clientes, son el camarón y la anchoa, que deben ser presentadas lo más frescas posibles y bien atadas con hilo mágico, para evitar que se desprendan al menor toque. Usualmente se usan líneas de dos anzuelos corvineros chicos, con plomo corredizo y brazoladas de 40 cm. atadas a esmerillón, pero los puristas pueden optar por un aparejo simple de un solo anzuelo. Es una pesca de caña en mano, porque tras un par de toques ya no tendremos cebo. Disfrutamos una hora y media de un pique donde todos nos divertimos a su turno, asegurando las piezas con copo para izarlas a bordo y cobrando en total una docena de hermosos ejemplares. La frutilla del postre vino cuando Creo padre estaba asistiendo a quien esto escribe y ve su caña sacudirse bruscamente. Le pide “al nene” que atienda ese pique y al recoger vino un doblete conformado por una corvina de kilo y medio y un matungo de pejerrey de 700 gramos. Digno fin de fiesta con "las rubias del Plata” que en este momento en que estas líneas llegan a sus ojos deben estar acardumadas en mayor medida, comiendo mejillón asiático sobre los fondos de tosca de la zona. Llegaron los mimosos Una semana después, tras el éxito de un par de guías que rompieron la racha negativa de otros profesionales, decidimos ir por los primeros bagres de mar. La especie llega para reproducir en el cuello del embudo del estuario tras una larga migración desde el Brasil, aprovechando cuñas de agua salada que por su mayor densidad van por debajo del agua dulce que proviene de la cuenca del Plata. Salvo en zona Sur, donde se lo pesca en aguas bajas, en la parte Norte del río solo habita en los pozones y canales, siguiendo su derrotero ancestral para el desove, que por el mes de noviembre los encuentra en los cauces profundos del Guazú, el Bravo y en Uruguay. Da pena pescar la especie cuando uno toma en cuenta el proceso biológico que lleva a cabo para perpetuarse. Sucede que el macho, tras fecundar los huevos, recoge las crías y las transporta de nuevo al mar en viaje de regreso. Por eso se suele decir que a la vuelta, solo comen las hembras. De gruesa piel, el bagre muestra un color gris lustroso con destellos plateados, que va tornándose de color blanco hacia el vientre. Las luchas entre ejemplares a la hora de aparearse suelen dejar “heridas de guerra” en esa superficie lisa, donde entonces aparecen cortes y rayones. De aletas pectorales y dorsales armadas con púas defensivas, hay que tener cuidado al manipularlos porque éstas inoculan ardiente veneno, no mortal pero sí doloroso. El tiempo de los bagres de mar en el Río de la Plata se da siempre hacia el mes de octubre, siendo a partir de la segunda quincena cuando tendremos mayores chances de éxito en esta pesca. En Berisso, uno de los pioneros en esta pesca fue el recientemente fallecido Beto Hasain, hoy sucedido por su hijo Joaquín y los capitanes que tripulan sus tres embarcaciones. Con ellos fuimos por los mimosos. Saliendo de la marina del Sur, desde donde parte la mayoría de los guías de Berisso, hay que tomar dirección Sudeste a unos 18 Km. de la costa, por la zona del par 6. Allí los guías tienen celosamente guardados puntos clave en sus aparatos de GPS. Las concentraciones de bagres suelen darse en aguas que van de los 5 a los 8 metros, de fondo barroso, donde rara vez salen corvinas, que prefieren fondos de piedra. Por eso, pese a que usamos para ambas especies la misma carnada, no es frecuente cobrar ambas en una misma salida y hay que optar por una de las dos. Con respecto al pique, el bagre suele manifestar su presencia con un par de toques y después lleva firme. Ese es el momento de clavar, y asegurar la primera clavada con varios pumping (reiteración corta y repetida de la clavada), para luego dedicarnos a disfrutar su pelea. Normalmente anda acardumado y cuando encontramos pique no saldrá sólo uno sino varios. En esta reciente excursión, los primeros mochuelos tuvieron el tamaño promedio, de 2 a 4 kilos, y logramos una docena de ejemplares. Para el tiempo de salida de ésta nota, será posible hacer pescas de 25 a 30 por lancha, pero recomendamos ser medidos en el sacrificio de la especie teniendo en cuenta que está en temporada reproductiva. Si bien en el Río no hay ninguna veda, nuestro sentido común y fan de proteger el recurso debe medir nuestras acciones y por ello sugerimos matar los menos posibles. En cuanto a los tamaños, ocasionalmente suelen salir algunos de 7 a 10 kilos, pero son los menos, dado que la especie es depredada año tras año por redes y espineles. Pero cabe destacar que esta pesca, en Berisso, se hace con equipos bien livianos, a diferencia de zona Norte donde pescamos en pozones y usamos plomadas de 250 gramos. De acuerdo a ello, un equipo de bait cast liviano garantizará muchas emociones. Sobre el mismo hacemos correr un plomo de 60 a 90 gramos sobre el nylon del reel y rematamos en una bajada de 80 cm. que termina en anzuelos 6/0 o 7/0 sobre los que encarnamos una anchoa fresca atada con hilo mágico. La temporada de bagre de mar en Berisso ya está a pleno y la pesca se prolongará hasta principios de diciembre. Contrate un buen profesional para salir en el Plata y disfrute de dos especies con pique abundante y muy combativas, en estas semanas clave donde corvinas y bagres están a punto caramelo.

SERVICIOS Familia Hasaín: la salida cuesta $ 550 por embarcación para 4 personas, esto incluye carnada y combustible para corvinas y bagres. Teléfonos de contactos: 0221-4641952, Nextel: 642*37, celular: 0221-154314057 Familia Creo: Oscar Creo y su hijo cuentan con dos cómodas trucker equipadas con GPS y todos los elementos de seguridad, propulsadas por motores Yamaha de 40 HP. Salen los 7 días de la semana e incluyen en el importe carnada (para bagres y corvinas) y refrigerio. Reservas al TE 0221-4644973 Consejos Útiles: * Como en toda pesca “marina”, el encarne es fundamental. Presentar cebos frescos y atados de modo prolijo será garantía de éxito., La anchoíta, en el caso de la corvina, puede ser trabajada en filete o de a mitades, combinada con camarón. En cambio, para bagres de mar, atarlas enteras a la pata del anzuelo (sin pincharlas para no destrozar la carne) será lo ideal. * Equipos Bagres: cañas de 15 a 25 libras de hasta 2,60, tipo Shimano Convergente, reel rotativo cargado con nailon de 0,35 a 0,40 mm., plomos de 0,60 a 0,90 según la correntada y anzuelos 6/0. Corvinas: una caña liviana de bait tipo Shimano FX-C- 66MHb2 o similar, con reel rotativo de bait Marine Sport Brisa 8000 y nailon 0,35 para evitar cortes y por si se da algún bagre). * Manipular los bagres con cuidado, usando pinzas o bogagrip para izarlo. Nunca levantarlo con la caña y echarlo arriba del bote, porque comenzará a saltar provocando accidentes con sus púas venenosas. Usar calzado de media caña, con puntera reforzada para evitar accidentes por pisotones involuntarios (a veces salta fuera del cajón y queda alguno peligrosamente en el piso del bote). * Tomar una pastilla de Dramamine la noche anterior y otra dos horas antes de embarcar. Las olas cortas del río sumadas al olor fétido de anchoas, camarones y piezas de origen marino amontonadas en cajones, causan náuseas y pueden arruinarnos la salida. * No Deprede: corvinas y bagres sufren demasiado con redes y espineles como para sumar nuestro aporte negativo a la merma de las especies. Llévese alguno para consumo pero no vaya con la triste idea de amortizar el viaje en kilaje de pescado.

Los Pescaron In Fraganti...

Santa Fe
Veda pesquera en la provincia
Decomisan 4 mil kg de pescado en Fighiera
En el operativo se incautaron piezas de las especies patí, tararira, dorado -de captura prohibida en forma permanente- y sábalo. De estos últimos, más del 60 por ciento de las piezas no cumplía con la medida permitida (42 cm). En el marco de la veda pesquera que rige en todo el territorio de la provincia desde el 1º de noviembre, inspectores de la Secretaría de Recursos Naturales -dependiente del Ministerio de la Producción-, decomisaron en la mañana de hoy unos 4.000 kilos de pescado en la localidad de Fighiera. Durante el operativo, del que participó también personal policial y de Prefectura, se constató la presencia de una embarcación haciendo transbordo a un camión, propiedad de la planta frigorífica ‘El Timón‘, de la ciudad de Villa Constitución, de entre 3.500 y 4.000 kilos de pescado de las especies sábalo, patí, tararira, y dorado (de este último su captura está prohibida en forma permanente). Los inspectores del Ministerio de la Producción, explicaron que con los sábalos decomisados de los cuales más de un 60 % no cumplía con las medidas estipuladas (42 centímetros)-, la ley prevé que cuando se trata de grandes volúmenes se nombra al captor en calidad de depositario. De esta manera, además de ser sancionados con una multa económica, los responsables deberán conservar el cargamento en perfecto estado, para poder ser donado a entidades de bien público. Veda pesquera en la provincia La ley provincial 12.703, entre otras disposiciones, prohibe ‘la captura de toda especie de peces de río durante los meses de noviembre, diciembre y enero de cada año‘, para permitir durante ese período el desobe habitual de todas las especies. La norma exceptúa ‘a la pesca de subsistencia y a la captura realizada por medio de tanza con anzuelo con los alcances, modalidades y condiciones establecidos en la ley 12.212‘. En el marco de los trabajos que se vienen desarrollando en la Cadena de Valor del Río y sus Recursos, tres equipos técnicos de la Secretaría de Medio Ambiente y del Ministerio de la Producción visitan desde el pasado 3 de noviembre las localidades de toda la costa santafesina informando a la comunidad en general y a los pescadores en particular sobre la vigencia de la medida de restricción.
Fuente: Secretaría de Comunicación Social Nota publicada en http://www.ellitoral.com/index.php/id_um/35429